32. N U E V A P Á G I N A ! ! ! ! ! !

Pedidos de Oración

- Esta página se realizó con el único y pretencioso objetivo, de que todos aquellos quienes tengan la carga y/o necesidad de elevar una oración de clamor al Padre celestial, en el nombre de su amado hijo Jesucristo, puedan hacerlo a través de la oración en comunión con los hermanos.

- Todos hijos de un mismo Padre, por el designo de su voluntad, y por el sacrificio de un mismo Señor, Jesús llamado el Cristo.

Porque donde están dos o tres congregados en mi nombre, allí estoy yo en medio de ellos. (Mt. 18:20)

- La solicitud de pedidos de oración se deberán incluir al pie de la página, en el espacio creado a tal fin, que dice: "Publicar un comentario en la entrada" y hacer click en la tecla "Publicar un comentario".  Serán canalizados vía correo electrónico y luego de la moderación serán publicados, la variedad de los pedidos pueden ser diversos, por ej. salud, solicitud de trabajo, paz, aliento, trabas económicas, etc.

Y todo lo que pidiereis al Padre en mi nombre, lo haré, para que el Padre sea glorificado en el Hijo. (Jn. 14:13)

- Lo único que solicitamos, es que también mediante correo electrónico, nos cuenten de la evolución del pedido.

Este vino por testimonio, para que diese testimonio de la luz, a fin de que todos creyesen por él.  No era él la luz, sino para que diese testimonio de la luz. (Jn. 1:7-8)

- La modalidad será orar en el tiempo que se pueda pero en las horas exactas para que halla mayores coincidencias en la comunión, por ejemplo a las 9, 10, 14, 23, etc..

- No se postearán los apellidos de por quienes se ora, solo el nombre y la ciudad en la que habita, para preservar la privacidad.

Por esta razón me arrodillo delante del Padre, de quien recibe nombre toda familia en el cielo y en la tierra. Le pido que, por medio del Espíritu y con el poder que procede de sus gloriosas riquezas, los fortalezca a ustedes en lo íntimo de su ser, para que por fe Cristo habite en sus corazones. Y pido que, arraigados y cimentados en amor, puedan comprender, junto con todos los santos, cuán ancho y largo, alto y profundo es el amor de Cristo; en fin, que conozcan ese amor que sobrepasa nuestro conocimiento, para que sean llenos de la plenitud de Dios.

Al que puede hacer muchísimo más que todo lo que podamos imaginarnos o pedir, por el poder que obra eficazmente en nosotros, ¡a él sea la gloria en la iglesia y en Cristo Jesús por todas las generaciones, por los siglos de los siglos! Amén.  (Ef. 3:14-21)

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m.r.v.