LOS TRIUNFOS OBTENIDOS EN LA CRUZ:
Más allá del sufrimiento de Jesús en la cruz, al que no hay que restarle ninguna relevancia pues si bien Él es 100% Dios también es 100% hombre, tal es así que estando en el Getsemaní en un momento dijo: “…Padre, si quieres, pasa de mí esta copa; pero no se haga mi voluntad, sino la tuya.” “…Y estando en agonía, oraba más intensamente; y era su sudor como grandes gotas de sangre que caían hasta la tierra.” (Lc. 22:42,44). Mostrando en estos pasajes todo su sentir y todo su dolor como hombre.
Más allá de eso decía, en la cruz se obtuvieron grandes y definitorios logros que no obstante el paso del tiempo aún hoy disfrutamos, por ese contundente hecho de que Dios hace todas las cosas perfectas y que tiene la capacidad y voluntad de transformar lo malo en algo bueno, y vaya si esto lo es.
